miércoles, 7 de mayo de 2025

Retractación de la decisión tomada: este blog sigue adelante

Parecía que estaba claro el asunto: había llegado el momento de finiquitar este blog y seguir con mi vida, "encarnando" otros personajes virtuales y proyectos vitales, el principal de los cuales es un asunto muy personal e íntimo, llamado metamakgia. 

   Pero en la vida nada suele ser lo que parece. 

   Cuando uno tiene ya su recorrido vital y un bagaje repleto de experiencias, esto se pone meridianamente de manifiesto. He aquí el caso arquetípico.

   Han pasado unos pocos días desde que tomé la decisión de cerrar este blog. Pensé lo obvio, que he pensado tantas veces a lo largo de mi medio siglo de vida (hoy cumplo los 50): se acabó esta aventura y ha llegado el momento de empezar otra nueva. Esa decisión, a pesar de las veces que la he tomado, no acarreaba ninguna consecuencia. Pero hoy todo ha sido diferente.

   Lo que nunca hubiera esperado ni imaginado es que este blog fuera necesario para alguien a algún nivel. Pensaba en él como en un granito más de arena en el desierto de lo virtual: ¿Por qué alguien prestaría atención a tu granito, cuando hay tantos granitos, que son incontables y seguramente mejores?

   Hace una hora aproximadamente mi mujer (que está esperándome para irnos a celebrar mi cumpleaños) me llama por teléfono para contarme que en el perfil de TikTok (si es que se dice así) alguien que afirma ser "un lector asiduo de tu blog" ha enviado un mensaje por privado para mostrar su pena por mi decisión, deseándome éxito en mis nuevos proyectos y un aviso si regreso. Bueno, solo por esta muestra de agradecimiento sentido, ya era suficiente para volver.


   Pero la cosa no queda ahí: cuando visito una última vez este blog, antes de olvidarme de él, veo un comentario en la misma línea y muestra de apoyo, sentimiento de pérdida, tristeza e incluso decisión de seguir el nuevo proyecto, que no tiene nada que ver con esto y es una "frikada" ultrasubjetivista total.


   Así que, bueno, evidentemente conmovido por esas muestras de apoyo y sinceridad (un servidor pensaba que internet era más bien troleo, ciberacoso y cosas por el estilo, pero veo que hay vida mucho más allá de eso y además no es mi caso) considero objetivamente que algo valorado por alguien a niveles como "agradezco su invaluable contribución a mi formación literaria y cultural", no puede quedar muerto y detenido aquí, pues siento esa muestra como el mayor regalo que alguien me puede ofrecer. Pero además el comentario empieza de una manera que me ha hecho replanteármelo todo: "Nunca escribo comentario alguno, pero hablo por muchos".

   Emocionado y conmovido, me retracto y revoco la decisión tomada hace unos días. Esto sigue adelante con más ilusión y pasión todavía que antes. Os prometo, queridos lectófilos, queridas lectófilas (y a quien no se identique con él o ella pero ame la lectura), nuevos descubrimientos y reseñas apasionantes. O al menos esa será, como siempre, la intención. 

   Antes esto era una decisión personal que me incumbía únicamente a mí; una necesidad de compartir algo muy personal. Ahora esto empieza a ser una comunidad, menor, mayor, no importa, que le gusta e incluso considera importante lo que se comparte por aquí. Así que en esta nueva etapa estoy abierto a ideas, sugerencias, propuestas, lo que sea.

   Muchas gracias por vuestra atención y muestras de cariño. 

   Ahora sí, me voy a vivir el 50 aniversario, que no siempre se cumple medio siglo de vida (y mi mujer está de los nervios esperándome hace más de una hora).

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