En la concepción "transurfera" de la realidad un PÉNDULO es el impulso energético mental de los pensamientos, que empieza a moverse y oscilar por primera vez con fuerza de verdad cuando varias personas se unen compartiendo una serie de intereses comunes, especialmente a través de afinidades ideológicas.
Pero antes aclaremos conceptos para entendernos mejor.
Probablemente uno de los conceptos que más arbitrariamente usamos (sobre todo en la espitualidad nueva era, el orientalismo y la autoayuda) hasta haberlo convertido en un significante vacío, es "energía". Cuando use el concepto "energía" no me referiré a la idea espiritual proveniente de Asia, donde se entiende como una especie de fuerza vital mística (chi, ki, prana) que lo imbuye todo y circula por el espacio. Me parece una concepción demasiado abstracta y especulativa sin fundamento. Usaré el concepto "energía" para referirme a su definición etimológica y lo que quiere expresar en verdad: procede del griego 'enérgeia' y significa: 'actividad, operación'. Pero también proviene del griego 'energós' y significa: 'fuerza de acción, fuerza de trabajo'. Se relaciona con la idea de una capacidad para obrar, surgir, transformar o poner en movimiento. Y es precisamente esta última acepción donde centraré mi interés: cuando hable de "energía mental" o "estructura mental energética", por ejemplo, no me referiré a un poder místico emanado por la mente, sino a la capacidad humana para manejar los pensamientos y organizar ideas, que se conviertan en ideales y generen ideologías, cuya finalidad sea influir en los demás y poner en marcha algo, lo que sea: un proyecto inmaterial o una creación material.
Según el modelo del Transurfing, cuando dos o más personas se juntan con pensamientos orientados en la misma dirección, surgen los grupos y estos son la semilla de una estructura de información energética (información dinámica, en movimiento y con una orientación intencionada, es decir, destinada a la obtención de ciertas finales).
Esas estructuras de información energética son los PÉNDULOS, en terminología "transurfera".
Entender correctamente el término primero para luego implementarlo en nuestra vida considero que es de la mayor importancia, arreglo a mi experiencia vital. Probablemente sea la mayor aportación útil de Vadim Zeland. Es la parte más "krishnamurtiana" del Transurfing a mi juicio. Además, tras haberlo estudiado al detalle durante los últimos tres días, puedo corroborar su efectividad si lo aplicamos (no por esos tres días de estudio sino por la década que pasé implementando las reflexiones mayéuticas de Krishnamurti). Pero el autor ruso ha llevado mucho más lejos el asunto de nuestra naturaleza mental condicionada (así como la "inconscienciación automatizada", término de cosecha propia) con la idea de los PÉNDULOS, de lo que Krishnamurti jamás llegó ni a soñar.
Lo más significativo a mi parecer (siendo aquí donde entramos en un resbaladizo terreno metafísico y tal vez incluso "esotérico" a investigar) es cuando Zeland afirma que, si bien al principio los PÉNDULOS son creados por la actividad mental humana de los pensamientos asociados, no obstante luego esas estructuras pendulares de información empiezan a desarrollarse independientemente por su cuenta, es decir, se vuelven independientes de los seres humanos que las han creado. Hasta aquí puede llegar una mayoría, pero a partir de entrar en un terreno reificador solo se quedan los que manejan (se manejan con) el pensamiento mágico. Personalmente estoy seguro (aunque no sé cómo sucede) de que es así como sucede, pero con muchos matices, pues a pesar de parecer una reificación (darle vida ilusoria a objetos o ideas inanimadas para intentar percibir una animación inexistente) no es una verdadera reificación al uso, ya que estas estructuras pendulares de información solo se sostienen si la suficiente cantidad de gente sigue sosteniéndolas. Pero eso viene a continuación.
Lo importante del asunto según yo lo veo es entender la explicación zelandiana de la mecánica funcional que tiene toda estructura pendular de información: cuando estas estructuras empiezan a desarrollarse independientemente de la voluntad de cada individuo que las compone (entregando su actividad mental y emocional a la estructura), "somete" a todos los componentes a una subestructura legislativa. Sí, lo más destacable de los PÉNDULOS es que todos tienen una serie de leyes o normas o principios que los definen y le dan sentido, por tanto deben cumplirse. Esa subestructura legislativa está por encima de todo y cada individuo que forma parte de la estructura pendular debe acatar esas leyes. Cuando no sucede así, entonces el PÉNDULO tiene dos opciones: o expulsa o destruye. Dependerá de lo destructivo que sea el PÉNDULO (aunque todos lo son en mayor o menor medida). Y también dependerá (y aquí está el quid de la cuestión) de lo consciente o inconsciente que sea cada individuo en relación a su conocimiento o desconocimiento de la mecánica pendular y tanto de la actitud que tenga después, como de los modelos mentales que maneje a nivel personal.
El mundo humano funciona gracias a los PÉNDULOS, por tanto es inevitable estar en relación continua y constante a diario con ellos. Sin PÉNDULOS no existiría la sociedad y todo colapsaría, de ahí la importancia tan grande que tiene (como afirmaba al comienzo de esta reflexión) el asunto. Todo lo que nos rodea desde que nacemos hasta que morimos y desde que nos levantamos hasta que nos acostamos mientras estamos vivos, está permeado por estructuras energéticas pendulares de información. Por eso es necesario entender cómo funcionan y de qué maneras podemos relacionarnos con ellos desde la mayor eficiencia y menor pérdida de energía. Ya que la finalidad de todo PÉNDULO es "robarnos" la mayor cantidad de atención e intenciones para poder continuar oscilando sin parar. Será nuestra responsabilidad (pues nadie podrá hacerlo por nosotros) conocer cómo sucede esto y lidiar de tal manera con ello, que acabemos aprovechándonos nosotros de la energía pendular en la consecución de nuestros propósitos, entregando la menor energía posible a los PÉNDULOS que nos rodean y evitando, especialmente, que nos absorban por completo en la inconscienciación automatizada.
Los más evidentes ejemplos de PÉNDULO a nivel histórico son: la religión, la filosofía, la política, las artes y la ciencia. Toda forma de conocimiento organizado y compartido se convierte en un PÉNDULO. La familia es el mayor PÉNDULO no elegido, pero más condicionante en la vida de la aplastante mayoría de personas. Aunque el mayor PÉNDULO en la actualidad y con diferencia es internet y sus residuales productos adheridos, destacando las redes sociales. Presta atención al funcionamiento internáutico, infórmate de lo que sucede allí, observa el comportamiento humano en lo virtual y entonces tendrás una cartografía exacta de qué son los PÉNDULOS y cómo funcionan. Por descontado que el Transurfing también lo es (por eso aprovecha lo que necesites de él y desecha el resto).
Por último, afirma el autor ruso, hay dos maneras de tratar eficientemente con los PÉNDULOS: el hundimiento y la extinción. Tratar esa cuestión aquí ya excede mis competencias.
Las preguntas, por tanto, son estas:
¿Puede tener algún valor la idea "transurfera" de los PÉNDULOS?
¿Qué pasará si la implementamos en nuestra vida cotidiana?
¿Podrá el Transurfing ayudarnos de algún modo o acabará convirtiéndose en un PÉNDULO más?
No hay comentarios:
Publicar un comentario