viernes, 1 de agosto de 2025

'LA TEORÍA SINTÉRGICA' de Jacobo Grinberg Zylberbaum (reseña)

Acabo de leer el libro LA TEORÍA SINTÉRGICA.

   Escrito por el psicólogo mexicano especializado en neurofisiología Jacobo Grinberg Zylberbaum, cuyo perfil biográfico aparece desarrollado al detalle en el artículo anterior.

   Mi ejemplar es una primera edición publicada en mayo de 2025 por Roca Editorial de Libros, fundada originalmente en 2003 por Blanca Rosa Roca con otros socios, aunque fue comprada por Penguin Random House Grupo Editorial en 2023, tras convertirse en una de las editoriales más consolidadas, buenas, fiables y de calidad dentro del mundo de la edición en España.

   En realidad se trata de una reedición cualitativa de la obra original publicada en 1990 por el INPEC (Instituto Nacional para el Estudio de la Conciencia), fundado en 1987 por el doctor Grinberg, con la financiación de la UNAM (Universidad Nacional Autónoma de México) y Conacyt (Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología). El motivo es para dar a conocer el pensamiento del doctor Grinberg coincidiendo con el trigésimo aniversario de su misteriosa y nunca resuelta desaparición (aunque las evidencias apuntan a un secuestro delictivo).

   El breve y escueto libro tiene 100 páginas repartidas en la introducción, 7 capítulos numerados con números romanos y titulados, un epílogo, un apéndice, la bibliografía y los agradecimientos de Estusha Grinberg, la única hija del autor. Va precedido por una introducción de 26 páginas aparte que también parece llevar los otros libros.

   Esta introducción titulada 'JACOBO GRINBERG-ZYLBERBAUM: EL QUIJOTE DE LA CIENCIA' está escrita por Emiliano Ruiz Parra y sinceramente me ha parecido lo más interesante del libro con diferencia. Estamos ante un estudio exhaustivo y profundo a nivel biográfico, casi de análisis forense, sobre la vida y el pensamiento del doctor Grinberg, sin dejarse nada en el tintero.

   Se trata de un microensayo que pretende presentar la creación más importante del autor, pero tiene varios problemas a mi juicio de fanático lector fiel de ensayos: está escrito con demasiada rapidez y superficialidad para la cantidad de temas que intenta tratar, por tanto hay un significativo desfase entre la ambición temática tan amplia y el apresuramiento atropellado por finalizar el libro, contando que: "He dedicado 15 años a la creación y desarrollo de un novedoso cuerpo mental al que he denominado teoría sintérgica. En este libro presento las bases conceptuales de este modelo de la realidad. [...] nunca he presentado la teoría sintérgica como un producto acabado y completo. [...] El origen de la teoría sintérgica fue la pregunta acerca de cómo se realiza la transformación de la actividad cerebral en experiencia sensible" (página 1). Sinceramente considero que, al menos en lo que respecta a este libro, el doctor Grinberg se quedó muy lejos de conseguirlo.

   El primer dato curioso es que todo el corpus argumental de la hipótesis grinbergiana se fundamenta en un único concepto angular sobre el que pivotará su teoría. El concepto referido es lattice, un anglicismo inespecífico que se usa en una amplia variedad de significados distintos, por tanto tropezamos con un primer escollo: la alta probabilidad de confusión equívoca. Pero veo un mayor problema esencial a nivel lingüístico: ¿Por qué la obcecación hispanoparlante en el uso de los anglicismos, cuando nuestra lengua es tan rica o más que el inglés? Todavía más problemático si cabe en este caso, pues se trata del concepto que no parará de repetirse a lo largo del libro, ya que es la explicación subyacente como fundamento de la teoría grinbergiana.

   Tras reflexionar escuetamente sobre la incapacidad del cerebro para decodificar la organización energética del espacio en su totalidad y por tanto la inevitable reducción neurológica a una diminuta porción de ese espacio, afirma el autor esto: "La mecánica cuántica ha bautizado con el término lattice a la estructura. La lattice, enrejado o celosía, debe poseer una capacidad de inclusión informacional colosal para permitirle contener toda la información del universo en cada uno de sus puntos" (página 4). Aunque suena prometedor y fascinante, la verdad es que nunca jamás he leído ni oído (al menos hasta donde recuerdo) nada parecido, excepto en la lectura del libro del doctor Grinberg aquí reseñado. 

   Si bien es cierto que el anglicismo "lattice" se traduce aproximadamente como "enrejado", "celosía", en realidad los amplios usos hacen referencia a un concepto de física que sí parece estar relacionado con la mecánica cuántica de varias formas (aunque ninguna de las 2 según la interpretación grinbergiana), a varias empresas, a un tratamiento de radioterapia en oncología y a un concepto matemático que, si bien se aplica en la cromodinámica cuántica, no tiene relación alguna con la explicación grinbergiana, por tanto, el doctor Grinberg usó el anglicismo para darle un nuevo sentido y significado propio, que solo existe en el contexto de la teoría sintérgica: estructura en forma de rejilla que contiene toda la información del universo y el cerebro que, mediando la actividad neurológica, decodifica la información contenida en un punto concreto. En principio tiene cierta semejanza con la concepción de la física (representación de una superficie que usa puntos de muestra espaciados con regularidad, también conocidos como puntos de malla), pero luego se desvía para llevarla por otros derroteros que son una aportación especulativa propia pero no está consensuada más allá de su hipótesis sintérgica. 

   Y aquí tropezamos con uno de los peligros más problemáticos a mi parecer: el uso incorrecto e inadecuado pero muy popular que se ha establecido en la espiritualidad nueva era, al menos desde 1975, cuando el físico austríaco Fritjof Capra publicó un libro superventas titulado EL TAO DE LA FÍSICA (Luis Cárcamo, Editor, Madrid, 1987), haciendo comparaciones equivalentes entre la mecánica cuántica y la teoría de la relatividad, con el hinduismo, el budismo y el taoísmo. A partir de ese relato especulativo convertido en un cliché espurio dentro de la literatura y el movimiento nueva era, se ha popularizado un error de apreciación que la aplastante mayoría de físicos especializados en mecánica cuántica rechazan con vehemencia desde entonces, aunque tan persistente que al final se ha decidido acuñar una concepción peyorativa, llamada misticismo cuántico, para diferenciar la verdadera mecánica cuántica de todos los intentos por desvirtuarla desde la espiritualidad. Viendo los argumentos del libro aquí reseñado, mucho me temo con pesar que el doctor Grinberg perteneciera a ese tipo y por tanto, pueda estar justificado el rechazo de la teoría sintérgica por parte de la comunidad científica.

   Y cuando digo lo anterior es porque desde el principio el autor hace comparaciones de su teoría sintérgica con creencias y cosmovisiones religiosas o espirituales, partiendo de una especulación que intenta asociar una concepción propia relacionada por él con la mecánica cuántica y la neurofisiología, explicando que: "El término sintergia es un neologismo derivado de las palabras síntesis y energía" (página 9). Bueno, si la incorrecta interpretación de la mecánica cuántica en el llamado misticismo cuántico ya era problemática, nada lo supera más que el manido concepto "energía", altamente polisémico y usado ubicuamente por la espiritualidad para hacer referencia a una abstracción jamás evidenciada ni demostrada. Ya no solo hablaríamos de la problemática que supone establecer la teoría sintérgica en el ámbito del misticismo cuántico (pretender que las concepciones de la mecánica cuántica son equivalentes o similares en el trasfondo a los misticismos religiosos y/o espirituales de la antigüedad), sino que su intento por exponer las concepciones de complejas cosmovisiones que van desde la cábala hasta el budismo, pasando por el shamanismo o la psicología transpersonal, a mi juicio se queda no solo reducido, sino tan descontextualizado que no se puede ni tomar en serio. Lo hace en el capítulo IV, 'LOS ORBITALES DE CONCIENCIA' (páginas 43 a 66).

   Si bien, no obstante los inconvenientes presentados según mi opinión, me parece lo suficientemente interesante la teoría sintérgica en el trasfondo de lo que expone, así como la sinceridad e integridad profesional del doctor Grinberg en sus rigurosas investigaciones de laboratorio, sintiendo el máximo respeto por su figura que ya mostré en el artículo anterior dedicado a su persona y trabajo, sin duda que este libro y su intento por explicar la teoría sintérgica me parece nefasto, excesivamente ambicioso pero totalmente incompleto, superficial, apresurado y mal escrito. A mi juicio estaría clasificado dentro de los peores libros de autoayuda, espiritualidad nueva era y sin duda, misticismo cuántico del más básico e insustancial, pues ofrece una idea bastante equívoca, reduccionista, confusa y descontextualizada, no tanto de la mecánica cuántica, como de las complejas tradiciones espirituales que intenta comprimir en apenas 23 páginas (incluyendo la pseudocientífica psicología transpersonal que se queda reducida a una pequeña parte de las ideas inventadas por un autor teórico que ni siquiera es psicólogo: Ken Wilber).

   Creo sinceramente que el doctor Grinberg se hizo un flaco favor a sí mismo y su reputación al publicar este libro. Ojalá su otro libro reeditado por Penguin en esta misma colección y buena edición de Roca Editorial sea mejor, más completo o al menos aclare algo de la teoría sintérgica, profundizando en ella más allá de la idea superficial de neuronas relacionadas con una estructura espacial cuadriculada de información que decodifica el cerebro para crear la realidad, como profundizar en la decodificación neuroalgorítmica o el factor de direccionalidad y su mejor aportación a mi parecer: el potencial transferido; todo ello con mayor exhaustividad y esa integridad rigurosa que le caracterizó como investigador.

No hay comentarios:

Publicar un comentario